Tú eres mi refugio, Padre. Solamente en Ti puedo encontrar la calma que mi corazón cansado necesita para respirar, para volver a sentir que la vida es maravillosa porque Tú estás a mi lado. Tú eres mi fortaleza, Todopoderoso, escucha mi ruego, apiádate de mí y ayúdame. En este momento la vida me sorprende con situaciones inesperadas, mi Señor. Son problemas que me llenan de agobio, que me llenan de pesar. Estoy sufriendo, amado Dios, viendo cómo mi papel de guía para mis hijos se está volviendo cada vez más difícil, cada vez más complicado. No solamente soy yo quien sufre, Señor, sino también mi pareja. Ahora somos padres que se encuentra preocupados, pues no sabemos cómo manejar ciertas cosas, mi Dios, por eso recurro a Ti, porque estoy convencido de que contigo todo es mucho más fácil y llevadero. Te pido que nos cuides y nos ayudes a salir de esto. Bendito Dios, oro porque necesito de tu fuerza para superar los malos momentos que paso con mis hijos. Ayúdame, Señor mío. Quizá hemos ...